El adjetivo multicultural procede del latín y está compuesto por el prefijo multi- „mucho“ y la raíz verbal cultural.
Sin embargo, el término multiculturalidad debe distinguirse de multiculturalismo. El primero significa una descripción de un estado, mientras que el segundo denota un movimiento político y una actitud ante la vida (cf. Beyersdörfer 2004, 43).
Multiculturalismo es un término descriptivo, mientras que multiculturalismo tiene implicaciones normativas (cf. Beyersdörfer 2004, 43). Según Mintzel, el multiculturalismo se refiere a un hecho social: „A saber, el hecho de que coexistan varias culturas en una sociedad o en una sociedad/población organizada por el Estado“. (Mintzel 1997, 58).
El fenómeno de lo multicultural está aquí en primer plano: „Ya sea pacíficamente o en conflicto, ya sea en una coexistencia o en una unión integrada. El multiculturalismo denota, por consiguiente, una característica sociocultural de una sociedad, su múltiple diferenciación cultural, cualquiera que sea el fundamento de este multiculturalismo“. (Mintzel 1997, 58)
Formas de características multiculturales
La investigación distingue cuatro modelos de sociedades multiculturales:
El modelo asimilacionista es un modelo „que tiene como objetivo la adaptación cultural de las culturas minoritarias o inmigrantes“ (Lüsebrink 2012, 20). Una variante de este modelo es el modelo integrador, que también persigue la adaptación cultural, pero asume una fase de transición más larga y concede a las culturas minoritarias derechos especiales en los ámbitos escolar, político o religioso (cf. Lüsebrink 2012, 18).
„El modelo del apartheid, que se hizo realidad, como en Sudáfrica antes de 1995, en el >Tercer Reich< así como en numerosas sociedades coloniales“, tiene como objetivo „la separación estricta, el aislamiento y a menudo la guetización de las minorías culturales“ (Lüsebrink 2012, 21) . En estas sociedades prevalece una jerarquía en la que el origen se absolutiza. Los límites del orden son impermeables y solo la clasificación étnica determina la distribución de las oportunidades sociales (cf. Lüsebrink 2012, 18).
El modelo policéntrico „se caracteriza por la coexistencia de diferentes culturas dentro de una sociedad que, en principio, se encuentra en pie de igualdad“ (Lüsebrink 2012, 21). Estas sociedades no tienen un centro cultural ni existe una mayoría superior: „Este estado agregado se produce cuando el marco histórico del universalismo europeo, el Estado-nación como unidad de pensamiento y acción, cede y la movilidad transnacional tiene lugar hasta tal punto que la sociedad mundial pasa de ser una abstracción a una realidad vivencial.“ (Leggewie 1993, 50)
Literatura
Beyersdörfer, Frank (2004): La sociedad multicultural. Conceptos, fenómenos, reglas de comportamiento. Münster: LIT.
Leggewie, Claus (1993): Multi Kulti. Reglas de juego para la república multiétnica. Nördlingen: Red Book.
Lüsebrink, Hans Jürgen (2012): Comunicación intercultural. Interacción, percepción extranjera, transferencia cultural. 3ª ed. Stuttgart: J. B. Metzler.
Mintzel, Alf (1997): Sociedades multiculturales en Europa y Norteamérica. Conceptos, controversias, análisis, conclusiones. Passau: Rothe.