„La didáctica de la historia ya no pretende enseñar a los alumnos tantos conocimientos resistentes al olvido como sea posible a partir de un canon fijo. Más bien, se pregunta y reflexiona sobre cómo pueden aprender los alumnos las preguntas, los métodos de pensamiento, las formas de trabajo y los contenidos de la historia que son importantes para ellos en la escuela, con el fin de aumentar su capacidad de recordar y conectarlos con una imaginación social históricamente ilustrada“. (Bergmann et al. 2003, 3)
Esta cita ilustra el intento de replantear el conocimiento histórico para ayudar a los alumnos a comprender mejor los procesos y problemas contemporáneos en un mundo en el que „lo global impregna cada vez más lo local“ (Forster/ Popp 2003, 5). Aquí es donde entra en juego la historia mundial con su perspectiva macro. Según Conrad, la historia mundial o historia global intenta superar las historias nacionales y sus espacios cerrados para representar y comprender mejor „los procesos transnacionales, las relaciones de intercambio, pero también las comparaciones en el marco de contextos globales“ (Conrad 2013, 9).
¿Qué es la historia mundial?
Para muchos autores, los términos historia mundial e historia global han convergido hasta tal punto que se puede hablar de sinónimos (cf. Sieder/Langthaler 2010, 9), lo que también se asume en lo que sigue en este texto. En términos más generales, la historia global se refiere a una forma de análisis histórico en la que los fenómenos, acontecimientos o procesos pueden situarse en contextos globales (cf. Conrad 2013, 9). Las interconexiones del mundo globalizado son el punto de partida de la historia global, centrada en el intercambio entre „cosas, personas, ideas e instituciones“ (Conrad 2013, 9). La historia mundial contemporánea cuestiona la orientación del currículo de historia y la orientación histórico-nacional y se caracteriza sobre todo por analizar los procesos de globalización y permitir a los estudiantes desarrollar una perspectiva macro de los problemas globales (cf. Forster/ Popp, 5).
Sin embargo, un estudio de la historia mundial no tiene por qué ser global en absoluto. Conrad describe que „puede […] ser global, pero dependiendo del tema o la cuestión […] no tiene por qué abarcar el mundo entero“ (Conrad 2013, 10). (Conrad 2013, 10). Las percepciones o preguntas más importantes resultarían de las interfaces de los niveles local y global y de „su manifestación local“ (Conrad 2013, 10). En el servidor educativo estatal de Baden-Württemberg, la historia global se entiende como un campo joven de los estudios históricos que también atrae cada vez más la atención de otras disciplinas. La quintaesencia de este joven enfoque sería el cambio de perspectiva desde el enfoque eurocéntrico y occidental hacia una toma de conciencia de las culturas no europeas (cf. Marks 2006, 178-180). Sin embargo, una definición precisa de la historia global es difícilmente posible, ya que los enfoques parten de momentos diferentes. Esto también se pone de manifiesto en el proyecto big history, que comienza con el Big Bang (cf. Conrad/Eckert 2007, 25).
Aquí se pone de manifiesto que, aunque los enfoques de la historia global y mundial son similares en su perspectiva macro, el alcance espacial y temporal de esta perspectiva puede variar enormemente de un enfoque a otro, de modo que una definición uniforme y precisa de este campo parece imposible (cf. Conrad/Eckert 2007, 25). Simon escribe lo siguiente sobre la cuestión de qué es la big history:
„La big history es un campo joven y transdisciplinar, en el que estudiosos de diversas disciplinas académicas buscan dar sentido a la historia contada por la totalidad del conocimiento humano.“ (Simon 2015, 2)
El alcance y la interdisciplinariedad de esta definición difieren significativamente de los enfoques que „simplemente“ tratan de describir los procesos de globalización o los contextos globales y hacerlos más comprensibles. En el enfoque de la gran historia, los descubrimientos científicos se contextualizan en el marco de la historia y la civilización humanas y se insertan en un „relato“: „Y está unido al arte de contar historias, que es competencia de las humanidades“ (Simon 2015, 2).
Según Conrad y Eckert, por otra parte, dentro del campo de la historia mundial pueden identificarse cuatro grandes perspectivas que han surgido en los últimos años: Economía mundial y sistema mundial, Análisis de las civilizaciones, Historia de la globalización y Estudios poscoloniales (cf. Conrad/ Eckert 2007, 15 y ss.). Según Sieder y Langthaler, por otra parte, la historia global o mundial „también incluye comparaciones sociales y culturales en la ciencia de la educación […], en la ciencia política, en la investigación antropológica social y cultural [y] en los estudios culturales“ (Sieder/ Langthaler 2010, 10).
Se hace evidente que aún no se ha llegado a un acuerdo en torno a la discusión académica sobre una definición de historia global porque los diversos enfoques difieren demasiado entre sí, ya que „apenas [existen] límites a los posibles temas histórico-globales“ (Conrad 2013, 198). En general, se puede afirmar para la dimensión temporal que la mayoría de los enfoques de la historia global se concentran en los contextos de la „época moderna“ y se distancian así del proyecto de una gran historia que comienza con el Big Bang (cf. Conrad/ Eckert 2007, 25). La visión de la dimensión espacial de los enfoques histórico-mundiales o histórico-globales no siempre se dirige al mundo entero, sino que la „conciencia de las conexiones globales“ (Conrad/ Eckert 2007, 27) desempeña un papel importante durante el análisis.
Resumen
Se puede afirmar que la historia mundial intenta cambiar la perspectiva desde una perspectiva micro a una macro centrándose en las interconexiones globales e intentando revelarlas. En consecuencia, según Conrad, pueden señalarse dos potenciales principales de la historia global. Por un lado, la historia global puede allanar el camino para una conciencia histórica global al centrarse en el intercambio internacional (cf. Conrad 2013, 26). Por otro lado, la historia global abre la posibilidad de observar la historia a vista de pájaro y mostrar así una visión más crítica de determinados acontecimientos (cf. Conrad 2013, 27). También es probable que este campo de la erudición histórica gane en importancia para la comunicación intercultural.
Literatura
Bergmann, Klaus/ Mayer, Ulrich/ Pandel, Hans-Jürgen/ Schneider, Gerhard (2003): Sobre la serie Forum Historical Learning. En: Popp, Susanne/ Forster, Johanna (eds.): Curriculum Weltgeschichte – Globale Zugänge für den Geschichtsunterricht. Schwalbach, 3.
Christian, David (2011): David Christian – Gesamtgeschichte, 11 de abril. https://www.youtube.com/watch?v=yqc9zX04DXs [03.07.2019].
Conrad, Sebastian (2013): Globalgeschichte – Eine Einführung, Múnich: Beck.
Conrad, Sebastian/ Eckert, Andreas (2007): Globalgeschichte, Globalisierung, multiple Modernen: Zur Geschichtsschreibung der modernen Welt. En: Conrad, Sebastian/ Eckert, Andreas/ Freitag, Ulrike, (eds.): Globalgeschichte – Theorien, Ansätze, Themen. Fráncfort del Meno: Campus, 7-49.
Forster, Johanna/ Popp, Susanne (eds.) (2003): Curriculum Weltgeschichte – Globale Zugänge für den Geschichtsunterricht, Schwalbach: Wochenschau Verlag.
Marks, Robert B. (2006): Los orígenes del mundo moderno: una historia mundial global, Stuttgart: Konrad Theiss.
Sieder, Reinhard/ Langthaler, Ernst (eds.) (2010): Globalgeschichte 1800-2010. Viena/ Colonia/ Weimar: Böhlau.
Simon, Richard B. (2015): Qué es la gran historia. En: Simon, Richard B./ Behmand, Mojgan/ Burke, Thomas (eds.): Teaching Big History. Oakland: University of California Press, 1-20.